Gracias Euge por darme «ese empujón» que necesitaba.
Me había defraudado conmigo misma, llegó un momento en no me sentía capaz de hacer las cosas más básicas que antes no tenía ningún problema, y es increíble cómo en una sesión de dos horas lo vi todo tan claro.
Ese miedo a fracasar que tenía venía desde mi niñez pero no se había desarrollado hasta que se pusieron las cosas difíciles. Siempre necesitaba que todo fuera perfecto y con el covid se desmoronó todo. Ahora no sólo estoy desarrollando mi nuevo proyecto con ilusión, sino que además estoy con mi familia mucho mejor.